La señal de "Precaución, alto voltaje: no tocar" es una característica de seguridad fundamental en entornos donde se instalan sistemas de alto voltaje. Su trabajo es alertar a las personas sobre los peligros potencialmente mortales asociados con el alto voltaje. Los sistemas de alto voltaje pueden transportar voltajes de varios miles de voltios, lo que puede provocar lesiones graves o incluso la muerte si se tocan. Por lo tanto, prohibir tocar el equipo es fundamental para minimizar el riesgo de descarga eléctrica. La señal no sólo pretende advertir del peligro inminente, sino también concienciar sobre los peligros y recordar a las personas que sólo personal autorizado y capacitado puede acceder a las instalaciones de alta tensión o realizar su mantenimiento. El diseño del letrero suele presentar colores llamativos como el amarillo y el negro para transmitir una advertencia clara, así como símbolos que dejan claro que está prohibido tocar. El letrero generalmente se coloca en lugares muy visibles cerca de instalaciones de alto voltaje, como cercas o puertas, para garantizar que cualquiera que pueda estar cerca de la zona de peligro lo note. En plantas industriales, subestaciones, obras de construcción o cerca de líneas eléctricas y transformadores, estas señales de advertencia son esenciales para garantizar la seguridad de los trabajadores, los visitantes y el público en general. Violar la prohibición de tocar no sólo puede provocar daños físicos graves, sino que también puede tener consecuencias legales. Por lo tanto, es de suma importancia que dichas señales de advertencia reciban un buen mantenimiento y se revisen periódicamente para garantizar su eficacia. En general, señales como "Precaución, alto voltaje - No tocar" contribuyen en gran medida a crear conciencia sobre los riesgos de seguridad eléctrica y prevenir accidentes que podrían ser causados por el manejo inadecuado de equipos de alto voltaje.